por Mark Glenn
Hace tres años que Mordechai Vanunu fue excarcelado, tras pasar 18 años en prisión por destapar el programa de armas nucleares de Israel. Ahora puede ir de nuevo a prisión, por violar la orden de un tribunal militar que le prohibía hablar con periodistas extranjeros.
El pasado 30 de abril Vanunu ha sido condenado de nuevo por un tribunal, por 14 cargos relacionados con la violación de los términos de su excarcelación, al haber concedido entrevistas a medios de comunicación estadounidenses, británicos, australianos y franceses, incluyendo a American Free Press. Se enfrenta posiblemente a seis meses de cárcel.
Desde su excarcelación, Vanunu ha rechazado quedarse callado sobre determinados temas, y muy especialmente sobre el tema de las armas nucleares israelíes. Vanunu teme que Israel –siendo un "estado-perro enloquecido” [“mad dog-state”], como el antiguo ministro de Defensa Moshe Dayan sugirió que fuera– acabe desatando su arsenal nuclear no sólo contra los países árabes, sino contra el mundo entero.
Vanunu declaró a American Free Press:
“Israel está decidido a llevar a cabo un genocidio de civiles inocentes… Lo hemos visto ya en los últimos cincuenta años a diferentes niveles, y esto siempre ha sido parte de la política secreta de Israel: Israel usará sus armas nucleares como un medio para evitar cualquier tipo de acuerdo de paz con los árabes y para imponer su política de ocupación y de desprecio del sufrimiento que ha causado a los palestinos en los últimos cincuenta años.”
A un nivel más personal, dijo a AFP que deseaba marcharse de Israel a algún lugar “libre” y “menos brutal”.
Y añadió: “He visto la fealdad de la sociedad israelí y por mi parte ya tengo bastante… A pesar de que he sido condenado, la verdad es que he ganado hoy, porque he demostrado una vez más que Israel no es un país democrático. Es un estado judío de apartheid donde sólo los judíos tienen derechos y donde los no judíos no tienen derechos. No hay libertad de movimiento ni libertad de expresión.”
Vanunu subrayó la hipocresía de Israel y de los Estados Unidos cuando hablan de otros países que tienen “armas de destrucción masiva”. Se refirió también al hecho consumado de la destrucción de Iraq, y a la posible guerra contra Irán.
Además de hablar públicamente sobre la capacidad nuclear de Israel, Vanunu ha expresado también en numerosas ocasiones su convencimiento de que Israel ha estado implicado a diferentes niveles en los ataques terroristas que se han sucedido alrededor del mundo, incluyendo el 11-S, las bombas de los trenes de Madrid y las bombas de Londres.
Tras obtener su “libertad”, y como consecuencia de su activismo, Vanunu ha sufrido una gran cantidad de amenazas por parte de sionistas, tanto judíos como cristianos.
Sin embargo, dado que la capacidad nuclear de Israel ya no es un secreto, cree que los ataques son de naturaleza personal, y ligados al hecho de que “abandonara la tribu” y se convirtiera al cristianismo.
Vanunu contó a AFP que esto llegó a ser un tema constante durante sus años en prisión, donde recibía visitas regulares de agentes del Shin Bet y del Mossad que le conminaban a renunciar a su conversión y “volver al redil”. Los comentarios que hace relacionados con su conversión revelan por qué algunas “partes interesadas” pueden estar detrás de actos de venganza contra él:
“Del mismo modo que Jesús criticó al judaísmo hace 2000 años, yo me negué a aceptar lo que ellos enseñan. Los judíos creen que hay un único Pueblo Elegido de Dios y predican su superioridad. Decidí que tras 2000 años esas ideas no tienen sentido. Hay seis mil millones de personas en el mundo, todas iguales, todas parte de la raza humana. No existe algo así como una súper raza”
“Todos deberíamos respetarnos y amarnos, y esto fue el comienzo de mi rechazo al judaísmo y mi aceptación de las enseñanzas de Jesucristo, y de mi aceptación de la humanidad. Los que enseñan judaísmo controlan y arruinan las vidas de los que están debajo de ellos, diciéndoles lo que deben hacer en cada momento del día, pero no enseñándoles a respetar a los seres humanos no judíos. Esto es el judaísmo, una colección de tradiciones primitivas de hace miles de años que no ha cambiado.”
Vanunu añadió que “Los judíos vinieron a Palestina en nombre de su dios, se quedaron con la tierra y expulsaron a la gente, y les dieron una vida dura, cruel, atroz, durante estos últimos sesenta años. Esta forma de pensar no puede darse en nuestros días, y ha sido esto lo que me llevó a exponer los secretos nucleares de Israel”.
Su sentencia se conocerá el 18 de mayo.
Fuente: American Free Press Nº 20, 14 de mayo de 14, 2007
Traducción Observatorio de la Islamofobia
Véase también:
«La posesión de la bomba atómica es lo que permite a Israel aplicar el apartheid sin temor»
Entrevista de Silvia Cattori a Mordechai Vanunu
